/ GIAMPAOLO POZZO 

El pionero del fútbol franquicia



Ganar dinero hoy en cualquier ámbito de la vida es casi una utopía, una misión solo al alcance de grandes ricos de cuna que invierten su activo en busca de mayores fortunas o por otro lado en manos de grandes pensadores que han generado imperios a base de oportunismo, suerte y determinación. En este segundo subtipo podríamos encajar a un tipo de 71 años, natural de Friuli (Italia) y que puede presumir a día de hoy de ser uno de los pocos personajes que ganan dinero en el negocio del fútbol, y este lo gana, y mucho además. Su nombre es Giampaolo Pozzo. 

Joaquín Rodríguez Lawrance                   @jrlawrance para @offrecordnews 


Este acomodado mecenas italiano, educado en Friuli, cuenta en su hoja de servicio con su última adquisición, el Watword, club inglés que ha completado un entramado empresarial que en apenas tres años ha unió Friuli, Granada y Londres utilizando el fútbol como vaso comunicante y permitiendo que tres equipos con representación en grandes ligas europeas como la italiana, española e inglesa se retro alimenten a base de jugadores, logística y cabezas pensantes. Udine, Granada y Londres nunca estuvieron tan cerca. El tipo desde luego sabe lo que hace. Pero vamos atrás en el tiempo, al año 86 fecha desde la cual Pozzo es propietario de su club fetiche, el Udinese, su marca blanca, salpicada por escándalos extradeportivos, con sede en la frontera con Eslovenia, sin ni siquiera una afición definida que mantenga a sus jugadores de pié en las gélidas noches del invierno adriático, pero sobre el papel un lugar estratégicamente ideal para trazar una sencilla política de bajo riesgo que genera a corto plazo y con una facilidad pasmosa, jugosas plusvalías que sostienen su elaborada infraestructura. Desde hace años ha sido Gino Pozzo, hijo de Giampaolo, el que se ha situado en el cuadro de mando de la nave y su fórmula ha descubierto en todo el mundo a jóvenes talentos a precios muy reducidos, que pronto se convirtieron en jugadores consolidados: Roberto Sensini, Oliver Bierhoff, Marcio Amoroso, Vincenzo Iaquinta, David Pizarro, Martin Jørgensen, sin mencionar a Sulley Muntari, Fabio Quagliarella, Antonio Di Natale, Handanovic, Felipe Días, Christian Zapata, Mauricio Isla, Gökhan Inler y Alexis Sánchez; Todos estos jugadores procedentes de diversos equipos han permitido al Udinese convertirse en un modelo para el fútbol italiano y mundial. La franquicia cuenta en la actualidad con una red de 110 jugadores de bajo coste, ubicados por toda Europa y cuyo destino será la obtención de importantes plusvalías en futuros traspasos. .


El hambre empresarial de los Pozzo no tiene límites y conscientes de que para que su activo pueda seguir revalorizándose necesita estar expuesto al gran público europeo y que mejor sitio que en equipos satélites con representación en grandes ligas. Aquí entra en escena Quique Pina, representante español afincado en Murcia y conocido por su pelotazo empresarial con el antigüo Ciudad de Murcia. Gino y Pina se habían conocido en el año 2001 y comenzaron a colaborar con aquel proyecto al que desde Tercera pusieron en Segunda y un año después casi en Primera. El modelo, era sencillo: Pozzo cedía jugadores que no le encajaban en el Udinese y Pina los mostraba. Les sacaba rendimiento y luego se generaban jugosos ingresos en traspasos. Eso hicieron con Henok Goitom, que llegó siendo un desconocido al Ciudad, y al que vendieron al Real Murcia en más de tres millones de euros. Un año después Pina empaquetó al club, le puso un lazo y le vendió sus derechos federativos, incluyendo la plaza en segunda, los jugadores y la infraestructura a un empresario Granadino quién fundaría con esos mimbres el Granada 74 a cambio de 20 millones de euros. El éxito fue rotundo y por aquel entonces la conexión Pina-Pozzo ya había comenzado. El murciano se convirtió en el embajador del modelo Pozzo en España y actuaría a su vez responsable de ojeadores del Udinese para fichar talentos por todo el mundo a bajo coste para luego revenderlos. Uno de ellos es Alexis Sánchez, fichado por los italianos a petición de Pina por cinco millones de euros que cuatro años después se han multiplicado por diez.. .


En el verano de 2009 no conformes con este entramado, dan paso a su siguiente captura, El Granada CF, y no por casualidad, ya que Pina había peinado previamente toda la geografía en busca de una ciudad con mercado y posibilidades reales de éxito deportivo y empresarial. Gino Pozzo compró el paquete mayoritaria de acciones del Granada CF, cuando el equipo competía en Segunda División B, y fue un éxito inmediato: de hecho, el equipo andaluz, gracias a las numerosas cesiones de jugadores del Udinese, logró dos ascensos en dos años alcanzando la Primera División.35 años después. Con esta gesta acababan de hacer realidad un pronóstico que habían hecho en 2009. “En 3 años el Granada estará en 1ª División.”, espetó Pina en una entrevista. Al final le sobro un año, y es que nadie mejor que el sabía del potencial de la capital andaluza cuando asumió el control de los rojiblancos cuando malvivían en Segunda B Y convenció a Pozzo para que le cediera a Dani Benítez (fichado por 300.000 euros a un Mallorca que para recuperarlo tendrá que poner más de ocho), Ighalo, Nyom, Mensah, Jaime o Mainz. El mismo camino han seguido hace un año los Orellana, Álex Geijo y Siquiera.. Y este verano Floro Florez y Torje..


El modelo es toda una demostración de gestión comercial pura y dura, una apuesta segura en la que un hombre piensa y mueve los hilos (Pina) y otro pone el dinero (Pozzo), ello les ha llevado ya a extender sus redes en otros clubes como Tenerife, Cadiz y últimamente Racing de Santander, clubes en los cuales la participación de Pina y su equipo como gestores deportivos se ha ido consolidando durante los 3 últimos años. El fútbol convertido en franquicia. El puzzle de Giampaolo Paozzo lo completa desde el pasado 19 de Junio, el Watford, club que milita en la First Division inglesa y que será el próximo satélite del Udinese. El empresario italiano adquirió sus accionariado convencido de que muy pronto podrá situarlo en la Premier League, quien sabe si peleando con los grandes, aunque el objetivo no ese, sino el de seguir siendo un escaparate comercial para su enorme remanente futbolístico.. Manuel Almunia y Almen Abdi son las primeras incorporaciones de su nueva aventura… ¿Dónde pondrá su siguiente pica?..